Dentro del grupo de los terópodos, aquellos dinosaurios bípedos y en general carnívoros y, donde encontramos a algunos tan importantes y conocidos como el Tiranosaurus Rex, podemos encontrar a un nuevo dinosaurio: El giganotosaurus.
Este animal prehistórico, por su tamaño y su papel de superdepredador, es una de las especies más importantes dentro del orden Theropoda (terópodos). Es por eso que merece una mención especial en una web de Dinosaurios.
Estos animales medían 14 metros de largo, aunque algunos estiman que pudo llegar a los 18 metros (aun no están de acuerdo). Esta diferencia de opiniones en referencia al tamaño es debido a las estimaciones que se extraen de analizar un cráneo de casi 2 metros de largo. Uno de los cráneos más grande de todos los Terópodos. Por ejemplo, el cráneo del T. Rex llega a 1,5 metros de largo como mucho, y el Spinosaurio llega ha 175 cm de largo y teniendo en cuenta que el Spino era un cazador mayormente acuático.
En cambio, el Giganotosaurio era un depredador terrestre. Fue un superdepredador del periodo Cretácico que vivió en Sudamérica. Pero como buen superdepredador, necesitaba la velocidad para poder dar caza a su presa. Por eso, aunque más largo que un T.Rex, en proporción era menos pesado, necesitaba correr. Los pesos que se barajan oscilan entre las 5 y las 8 toneladas. Y la dos patas traseras era verdaderamente fuertes. También su cola, que le proporcionaba el equilibrio necesario para las largas y rápidas carreras. Que se calculan podían llegar a 50 Km/h (como un perro rápido).
Por otra parte, el cuello también era bastante musculoso ya que tenía que mantener un enorme cráneo de casi 2 metros. Un cráneo con una mordedura verdaderamente fuerte de casi 3.000 kg por cm2, y una boca llena de dientes alargados y aserrados de hasta 30 cm de largos. Algo así como los colmillos de dientes de sable pero varios, casi 100 dientes. Además, sus patas delanteras eran pequeñas pero más grandes que las del Tiranosaurio. Lo suficientemente grandes como para sujetar a sus presas mientras mordía y desgarraba, mientras tiraba y rompía fibras y vasos sanguíneos y destripaba y mataba a sus presas que poco podían hacer una vez eran atrapadas.
Hace 96 millones de años, existió pues uno de los depredadores más temibles que jamás ha existido. Me atrevería a decir que más que el famoso T.rex.
Este animal prehistórico, por su tamaño y su papel de superdepredador, es una de las especies más importantes dentro del orden Theropoda (terópodos). Es por eso que merece una mención especial en una web de Dinosaurios.
Estos animales medían 14 metros de largo, aunque algunos estiman que pudo llegar a los 18 metros (aun no están de acuerdo). Esta diferencia de opiniones en referencia al tamaño es debido a las estimaciones que se extraen de analizar un cráneo de casi 2 metros de largo. Uno de los cráneos más grande de todos los Terópodos. Por ejemplo, el cráneo del T. Rex llega a 1,5 metros de largo como mucho, y el Spinosaurio llega ha 175 cm de largo y teniendo en cuenta que el Spino era un cazador mayormente acuático.
Por otra parte, el cuello también era bastante musculoso ya que tenía que mantener un enorme cráneo de casi 2 metros. Un cráneo con una mordedura verdaderamente fuerte de casi 3.000 kg por cm2, y una boca llena de dientes alargados y aserrados de hasta 30 cm de largos. Algo así como los colmillos de dientes de sable pero varios, casi 100 dientes. Además, sus patas delanteras eran pequeñas pero más grandes que las del Tiranosaurio. Lo suficientemente grandes como para sujetar a sus presas mientras mordía y desgarraba, mientras tiraba y rompía fibras y vasos sanguíneos y destripaba y mataba a sus presas que poco podían hacer una vez eran atrapadas.
Hace 96 millones de años, existió pues uno de los depredadores más temibles que jamás ha existido. Me atrevería a decir que más que el famoso T.rex.