Seguramente todos conoceréis al Armadillo, este pequeño animal con unas placas óseas que le recubren el cuerpo y utiliza a modo de protección enrollándose sobre sí mismo ante cualquier depredador. Pues bien, existió, hasta hace unos 10.000 años, un primo del armadillo conocido como Armadillo Gigante o, más comúnmente Gliptodonte.
El Gliptodonte era un enorme mamífero prehistórico que vivió en América del sur y que vino de América del Norte y cuya característica principal era su capa protectora, un caparazón que lo blindaba y protegía de los depredadores de la época.
Este herbívoro prehistórico estaba muy bien diseñado, su capa protectora le proporcionaba la seguridad para evitar ataques de sus depredadores. Pero su papel de presa no era pasivo, también podía defenderse con su robusta cola. Una cola pesada con puntiagudos huesos que bien utilizada era capaz de partir patas, costillas y los cráneos de sus depredadores.

